El consumidor sostenible de 2034 en España de Neture Impact arroja la percepción y prioridades de la ciudadanía sobre este fenómeno.
Cada año, con la subida de las temperaturas en la época estival, resurge el debate alrededor del cambio climático y su repercusión tanto en el medio ambiente como en el día a día de la sociedad. En este sentido, la población española es plenamente consciente del impacto que tendrá a largo plazo. De hecho, el 50% de los españoles se siente más preocupado por este fenómeno que hace un año, tal y como se extrae del informe “El consumidor sostenible del 2034 en España” de Neture Impact, la consultora de impacto positivo de VML, cuyo objetivo es conocer la visión, percepción y prioridades que tiene la ciudadanía respecto al cambio climático como protagonista indiscutible de la transición ecológica.
Asimismo, este fenómeno se sitúa en tercera posición en el ranking de inquietudes ciudadanas, solo por detrás de la situación sanitaria y la crisis económica. En este sentido, la denominada generación Z, personas nacidas entre mediados de los años 90 y los primeros años del siglo XXI, es la que está más preocupada por esta situación. Le sigue la generación X (1965-1980) y los llamados baby boomers (1946-1964).
Por el contrario, la generación que presenta una menor intranquilidad es la millennial (1981-1996), pero son las personas que tienen una percepción más alta de que su vida empeorará debido a la crisis climática (63%).
“Los millennials se incorporaron al mercado laboral en plena crisis económica, algo que pasa factura. También han vivido la crisis del covid, por eso, en cualquier encuesta que hacemos, priorizan siempre más los aspectos económicos que los colectivos, ambientales o sociales”.
Xavier Vallés, Managing Director de Neture Impact
Por otro lado, la ciudadanía detecta varias amenazas climáticas, entre las que destaca la disponibilidad de agua (58%), la exposición a fenómenos meteorológicos extremos (39%), la salud de las personas (35%) y el acceso a alimentos (32%).
El ciudadano ante la solución
Cuando se fuerza al ciudadano a escoger entre crecimiento económico y sostenibilidad, la población se fragmenta en grupos de peso similar:
- Un 33% se proclama decrecentista, es decir, prefiere un escenario de decrecimiento económico, pero que garantice grandes avances hacia la sostenibilidad.
- Un 34% es crecentista, le da prioridad al crecimiento económico por encima de los avances en sostenibilidad.
- Un 33% se declara neutral.
Las personas que optan por la sostenibilidad por encima del crecimiento económico, identifican el cambio climático como el aspecto que en mayor medida va a determinar sus vidas.
El ciudadano ante el solucionador
A pesar de los esfuerzos que puedan llegar de la sociedad, los españoles perciben a las administraciones públicas (57%) y a los científicos y tecnólogos (54%) como los principales propulsores de la reversión de la crisis climática. De hecho, un 59% considera que los gobiernos no están dando los pasos adecuados en la lucha contra la emergencia climática, mientras que un 57% asegura que las empresas son las principales responsables del calentamiento global.
Haciendo foco en los perfiles de población, los crecentistas confían más en la propia ciudadanía para enfrentar la transición energética, mientras que los decrecentistas lo hacen en los gobiernos, científicos y empresas.
El ciudadano ante sí mismo
La población española está comprometida con paliar el calentamiento del planeta, ya que creen que una evolución en el estilo de vida permitirá mitigar los efectos del cambio climático (41%).
Entre las acciones que se plantean están la de minimizar los productos de un solo uso y apostar por alternativas reutilizables, optar por alimentos locales producidos de manera sostenible o apoyar marcas y empresas que adopten prácticas responsables con el medio ambiente.
Con respecto a la movilidad, el aumento del uso del transporte público parece ser la pauta comportamental que más disposición genera para reducir la huella de carbono - siendo muy probable y probable que lo hagan (99%) -, seguido de viajar menos y hacer mayor uso de otras opciones de multimovilidad como las bicicletas y el car sharing.
Por su parte, en el hogar, prefieren reducir su consumo de energía - siendo muy probable y probable que lo hagan (96%) -, así como mejorar el aislamiento térmico de la vivienda, por encima de instalar paneles solares en su domicilio.
Tras analizar los resultados, una de las principales conclusiones del estudio “Los consumidores sostenibles de 2034 en España” (descargar estudio) es que la población es plenamente consciente del impacto que tendrá el cambio climático en sus vidas a largo plazo, dándole mayor importancia que a aspectos más mediatizados como el avance de la IA. Además, muestra más confianza en una transformación del estilo de vida que en los avances tecnológicos para revertir este fenómeno.